Misión
Proporcionar servicios sanitarios excelentes para la atención médica neuroquirúrgica de alta calidad, eficiente y segura de la población del área de influencia, integrando funciones de investigación y docencia y fomentando su marcada vocación histórica de servicio de referencia nacional e internacional para determinados servicios de alta cualificación asistencial y tecnológica.
Cómo introducir la misión en nuestro día a día
Nuestra atención será equitativa, personalizada, eficiente, segura y orientada hacia la excelencia. Para poder satisfacer las necesidades integrales y las expectativas de los ciudadanos de nuestro ámbito de actuación y de todos aquellos que elijan nuestros servicios, nuestra misión se llevará a cabo de acuerdo a los siguiente principios:
- Asistencia centrada en el paciente.
- Liderazgo clínico y empoderamiento de los profesionales.
- Eficacia clínica y Práctica médica basada en la evidencia.
- Evaluación de la práctica clínica o auditoría clínica.
- Gestión del riesgo clínico.
- Planificación y aseguramiento de la calidad.
- Desarrollo profesional y de la organización.
- Formación, investigación y desarrollo.
- Integridad y transparencia.
- Participación ciudadana.
Visión
Ser un centro de excelencia nacional e internacional en el campo de la neurocirugía mediante la actividad asistencial de calidad, la docencia, la investigación traslacional, la innovación tecnológica, la diversidad de sus miembros y la excelencia profesional.
¿Qué queremos?
Queremos:
- Lograr un lugar de trabajo excelente donde:
- Se logren los objetivos de la Organización
- Las personas den lo mejor de sí y sientan orgullo por lo que hacen
- Se trabaje en equipo en un ambiente de confianza, disfrutando con las personas con las que se trabaj
- Que nuestro trabajo (asistencia/investigación/docencia) sea de la máxima calidad, y que sea así percibido por la ciudadanía.
- Ser productivos: ser una organización eficaz y dinámica.
- Establecer alianzas con otras unidades, centros y niveles asistenciales, desarrollando una red de trabajo para crear un valor común y duradero para la ciudadanía.
Valores
Nuestros valores definen nuestra Unidad como un servicio público que busca la calidad en su sentido más amplio, orientado a conseguir la satisfacción del cliente externo e interno, adelantándonos y superando sus expectativas.
Nuestro equipo de profesionales siente la necesidad de comunicarse y de cooperar en el proyecto común, respetando las ideas de todos sus miembros. El compromiso, con el corazón y con la mente, y el trabajo de cada miembro deben aportar valor añadido a la Unidad y al Hospital.
Tenemos capacidad de adaptación, dinamismo, agilidad y creatividad, como para dar respuesta a los cambios de nuestro entorno e incorporar las nuevas tecnologías que sean útiles para nuestros pacientes; todo ello en estrecha colaboración con Atención Primaria y con el resto de los servicios implicados de la atención especializada. Nuestros conocimientos deben compartirse y distribuirse entre los miembros de la Unidad, Hospital y comunidad científica, generando un valor añadido.
Nuestro compromiso es, pues, la mejora continua de la calidad, reconocer y compensar por la contribución de cada uno a la consecución de los objetivos, integrarnos en la comunidad asistencial, docente e investigadora, respondiendo a los retos de la Neurocirugía de nuestro tiempo, con la mirada siempre dirigida a la excelencia.
Calidad
La Unidad tendrá como núcleo básico la calidad., en su sentido más amplio, que debe ser lo siguiente: hacer las cosas adecuadas, en el momento justo, a favor de las personas apropiadas y hacerlas bien la primera vez.
Liderazgo trascendente o compartido
Un líder trascendente es todo aquel que consigue alcanzar el equilibrio entre su capacidad para reconocer la misión y dirigirse a sí mismo, con la de gobernar y compartir el éxito, poniendo sus cualidades y carisma al servicio de los colaboradores, interaccionando eficientemente con las organizaciones gestoras del entorno.
Las principales cualidades de este liderazgo son: sentido de la escucha; empatía; capacidad para resolver problemas personales; conciencia justa; dotes persuasivas; conceptualización; intuición para prevenir riesgos; espíritu de servicio y compromiso, y sentimiento del grupo.
El liderazgo compartido permite la independencia y promoción individual de los profesionales, complementando la consecución de incentivos materiales con la capacidad de líder para crear una visión atractiva de la unidad y persuadir a todos para trabajar más allá de lo formalmente exigido.
Compromiso
El compromiso de los profesionales es determinante para alcanzar la satisfacción de la ciudadanía. Si apostamos por generar entusiasmo y compromiso, las personas aportarán responsabilidad, pasión, iniciativa y creatividad. Compromiso con:
- El paciente como centro del sistema
- Con la calidad del servicio
- Con los propios compañeros de la Unidad
- Con el Sistema Sanitario Público de Andalucía, y los objetivos y directrices de nuestra organización.
El empoderamiento de los profesionales
El empoderamiento es un proceso bidireccional, que por un lado supone un modo de actuación del directivo dirigido a dar poder a los profesionales de tal modo que les capacite para potenciar sus recursos propios; y por otro lado, desde el punto de vista del profesional, un estado psicológico resultante del primero, que les estimula y motiva, concediéndoles el sentimiento de ser dueños de su trabajo.
En una organización dónde los profesionales están empoderados, los integrantes de la unidad: comparten el liderazgo; se relacionan y comunican más eficientemente; demuestran mayor entusiasmo y compromiso, y participan con mayor diligencia en la toma de decisiones.
Integridad
Entendemos integridad como la rectitud que se espera de todo profesional integro y que constituye la base para la confianza mutua en la Unidad, y la motivación, la iniciativa y el compromiso de los profesionales. Esta integridad debe comenzar en el propio director de la Unidad.
Información, evaluación y transparencia
La información garantiza la transparencia, la eficiencia y la igualdad de oportunidades, a la vez que se crea valor. La transparencia porque se pueden consultar y tratar datos que vienen directamente de las fuentes oficiales; la eficiencia porque ciudadanos y organizaciones pueden crear servicios más allá de lo que la propia administración es capaz; y la igualdad de oportunidades ya que el acceso es el mismo para todos los interesados.
La rendición de cuentas supone hacer visible el proceso de toma de decisiones, así como el método aplicado, y los resultados obtenidos. Un ejemplo claro en política sanitaria son las decisiones sobre la utilización o distribución de recursos, y el catálogo de prestaciones y cartera de servicios. Las decisiones que se toman, la manera en la que se toman y sus partícipes determinan su grado de justicia y equidad.
La evaluación es un elemento clave para la rendición de cuentas, la identificación y promoción de buenas prácticas, el análisis para la toma de decisiones y la asignación de recursos.
Innovación
La capacidad de innovar y mejorar para lograr la excelencia es un valor imprescindible en nuestra Unidad. Este valor incorpora: configurar una atención que se sustente en personal sanitario cualificado y motivado; crear una cultura de mejora de la calidad y formación continuada que promueva la acreditación de profesionales y de la Unidad, e invertir en investigación y desarrollo.
Accesibilidad
La mejora en el acceso a la atención sanitaria es una de las principales demandas de los pacientes y de la población en general. El acceso se traduce en el uso adecuado y a tiempo de los servicios sanitarios prestados por nuestra Unidad para alcanzar los mejores resultados de salud, cumpliendo las garantías de respuesta en la atención, sin más criterios que el de la necesidad en salud.
Efectividad o eficiencia clínica
La efectividad en la atención sanitaria hace referencia al grado en el que una intervención -servicio, proceso, procedimiento, prueba diagnóstica o tratamiento- produce el resultado deseado. El concepto de efectividad incluye, por tanto, el nivel de adecuación de la provisión asistencial, en la medida en que ésta se presta a las personas que pueden beneficiarse de ella.
Experiencia del paciente
Nuestra Unidad debe dar respuesta a las preferencias, actitudes y expectativas de los pacientes. La atención centrada en el paciente se define como aquella que establece una adecuada interrelación entre profesionales y pacientes para asegurar que las decisiones que se toman respecto a su proceso asistencial tienen en cuenta sus necesidades, deseos y preferencias, asegurando que dichos pacientes tengan la formación y el apoyo necesario para una participación efectiva.
Seguridad
Constituye un elemento clave para la mejora de la calidad: proporcionar una atención y cuidados seguros al paciente. Implica minimizar el riesgo innecesario de daño al paciente, lo que se manifiesta en la ausencia de lesiones accidentales atribuibles a la provisión asistencial o errores médicos. Una atención sanitaria que promueve la seguridad del paciente en la prestación asistencial implica: gestión del riesgo; declaración, análisis y seguimiento de incidentes; e implantación de soluciones para minimizar el riesgo de su recurrencia.
Eficiencia
Una Unidad eficiente y de alto valor tiene como objetivo maximizar la calidad de la atención y los resultados obtenidos con los recursos disponibles, garantizando al mismo tiempo que las inversiones adicionales proporcionen un valor adicional neto con el tiempo. Asegurar el valor de los recursos significa utilizarlos de la manera más eficiente y efectiva posible, vinculando el concepto de calidad científico-técnica, al concepto de eficiencia y de sostenibilidad como una perspectiva esencial en la práctica profesional.
Trabajo en equipo
Trabajo en equipo significa tener objetivos comunes que hayan sido pensados entre todos, reconocer la contribución específica de cada uno de los otros profesionales al trabajo en equipo y favorecer entre ellos una buena comunicación, coordinación y colaboración. En definitiva, no se trata de trabajar como un grupo de personas juntas, sino que entre ellas exista una unidad. El trabajar en equipo demuestra tener una repercusión directa en la calidad y en la eficacia del cuidado proporcionado al paciente, así como en su seguridad e incluso en los costes, al disminuir la estancia hospitalaria y mejorar los resultados del paciente. Además, el trabajo en equipo tiene otros beneficios que repercuten, por un lado, en los profesionales como son: la disminución del estrés, el aumento de su satisfacción y el incremento de su desarrollo, y por otro lado, en la institución con la optimización de los recursos, una mejor planificación del futuro con soluciones creativas en la resolución de los problemas, la disminución de los costes y en definitiva, llevar a cabo un trabajo de mejor calidad.